Comparaciones

No puedo evitar comparar, estoy acá, pero soy de allá. La gente, los periódicos, la televisión, la política.
La gente, eso es lo que mas me llama la atención. Aquí hay una generación que a nosotros nos falta, y los que quedaron aprendieron a esconderse supongo. Allá por principios de los 80, V8 una mítica banda de rock empezó un concierto asi: "Basta de hippies, basta de paz, llegó la hora del metal". Desde ese momento en que empezó la democracia (otra vez) una pequeña porción de la población explotó en creatividad y excesos, dejando cosas brillantes pero también un sinnúmero de cadáveres por el camino.
Acá en cambio estan casi todos vivos, los ves por la calle, cincuentones de sandalias y barba, tomando café en las terracitas de los bares. Ves a sus hijos, que distinguís por los nombres bizarros y divertidos. Están aqui, vivos. Muchos tienen historias que contar, vicios que dejaron atrás, anécdotas ahora.
Nunca fui muy pro activista, pero me doy cuenta que toda esa gente que nos falta, que debería estar escribiendo libros, hablando en la tele, publicando columnas en los periódicos, formando una opinión publica tolerante. Toda esa gente que forma parte de un numero: 30.000. Ayer leí algo muy tonto pero que cuaja, lo malo de una muerte honorable es que hay una persona honorable menos en el mundo.